Vamos a ver, ya no tengo 10 años! Estoy a punto de cumplir los 14 años y eso se merece un cambio de looks importante, así que este sábado fui a la peluquería Caps y le pedí a Manolo que me trasquilara pero en plan fino, con estilo! Vaya sensación tengo ahora… cuando me paso la mano por el cogote tengo una sensación super extraña, sobre todo teniendo en cuenta que tenía el pelo tan largo que me podía hacer coleta. Mis padres dicen que por fin se me ve la cara, aunque su primera reacción fue un tanto rara… por la espalda ni me reconocían… Con el tiempo seguro que se acostumbran.

Este fin de semana los cambios no se acabaron ahí! Había quedado con unos colegas en el pueblo y todos iban con patín, así que por primera vez mami me dejó cogerlo para ir al pueblo. Un poco más y me hace poner una armadura, pero la presión del entorno le pudo y me dejó ir simplemente con el casco y una buena carga de consejos. A media tarde, estando con los colegas de arriba para abajo decidimos pasar por casa a pegarnos un baño, así que imagínate a 10 adolescentes en patín por las calles de Sitges. Vaya, que soy poli y los paro seguro!

¡Ahhh! Ya puestos en esto de sufrir cambios, dicen las malas y buenas lenguas que me ha cambiado la voz, que tengo voz más de hombre… jajaja, no saben lo que dicen. Si te digo la verdad, finjo un poco y voy de interesante. Es lo que toca a las 14… todavía no hemos llegado a lo que mi padre denomina «noches locas», pero ya se temen lo peor. De momento el fútbol me mantiene a raya, pero no sé hasta cuando.

A las 8.30pm algunos pensaron en ir a cenar algo por el pueblo, así que ahí va la tercera novedad el fin de semana. Pregunté si me podía apountar, y zasca! Afirmativo! Bueno buen bueno… esto es un punto de inflexión. Nos fuimos al pizza world, y una vez nos zampamos la pizza mami me vino a recoger.

Vaya fin de semana más competo! Si encima añadimos que esta semana ya acabamos el insti, podemos dar por inaugurado el inicio del verano, que realmente pinta muy pero que muy bien.