Pues no sé muy bien cómo me va a cambiar la vida teniendo DNI; por lo pronto voy a poder abrir una cuenta bancaria, hacerme socio del Barça y … Por cierto, en lugar de nacimiento aparece Sitges! Ufff.. eso me abrirá muchas puertas! Ser de Sitges tiene su caché.
Lo más complicado ha sido diseñar y practicar mi firma, ya que hasta ahora no había tenido que firmar ningún documento oficial. Y todo hay que decirlo: me ha salido una firma super chula! Con los años me imagino que la iré puliendo, pero ya tengo una muy buena base. Ahora a explorar todos los beneficios de ir documentado por la vida.
Éste ha sido un año de cambios: he empezado el instituto, he pasado al fútbol 11, tengo móvil, DNI y ya me están dejando salir a dar vueltas por el pueblo sin estar acompañado de un adulto. Todos son beneficios importantes que estoy experimentando este año, a la vez que van aumentando los privilegios en casa. Ahora que tengo móvil puedo liarla más con mis amigos ya que nos podemos comunicar directamente sin el filtro de las mamis… Uffff… es que hay veces que se comportan como investigadoras de la CIA. Además, ya diseñamos nuestra propia estrategia para conseguir lo que queremos.
¿Sabes lo que echo más de menos? Viajar y el mega bufet de los hoteles. Ya, ya, esto de la pandemia fue muy duro, pero es que todavía no hemos visitado ningún sitio desde que recuperamos la normalidad. A ver si convenzo a papi y mami de volar a algún sitio especial para Noche Vieja, aunque lo veo complicado si no podemos llevarnos a Kai. Mmmm… no había pensado en eso… bueno, igual propongo un viaje con los colegas, sin padres. ¿No cuela, verdad? Digo yo que tendré que esperar un par de años más para disfrutar de este privilegio. Papi sí que ha empezado a viajar de nuevo, de hecho ahora mismo está en Canarias disfrutando del buen tiempo mientras a nosotros nos toca vivir en tierras de esquimal.
Pues nada gente, nos leemos de nuevo antes de acabar el año…